Apuesta por el plato de ducha porque es práctico, dinámico y duradero. «Especialmente cuando se vive en la ciudad, donde el tamaño del cuarto de baño no supera los cuatro-cinco metros cuadrados, la ducha es una opción funcional y cómoda, que permite ahorrar espacio. Además, es rápida y encaja mucho mejor en el ritmo de vida actual, donde cada segundo cuenta», informa la revista ¡HOLA!
Con el plato de ducha ganarás sensación de amplitud, ahorrarás agua y energía. Paloma Ulloa, arquitecta técnica, explica que «los motivos fundamentales por los que los consumidores se deciden a escoger un plato de ducha para su baño es la modernización, la facilidad de acceso, el espacio disponible, el menor gasto de agua y energía y la seguridad que supone al reducir el riesgo de caídas y accidentes al entrar o salir de la bañera».
En este artículo te explicamos cuáles son las características esenciales de cada tipo.
Platos prefabricados
Presentan un menor riesgo de humedades y se instalan más rápidamente. En el mercado encontrarás diferentes materiales, diseños, medidas, colores y acabados.
Tendrás menos problemas en caso de avería, por lo que puedes retirar el plato y volverlo a instalar después. Aunque el material más demandado es la resina, también puede ser de porcelana.
Platos de ducha cerámicos
Estos platos de ducha son resistentes, económicos, sólidos y duraderos. Tienen bastante grosor y una apariencia robusta.
Desde Studio 360, expertos en diseño de interiores, explican que también puedes elegir los platos de ducha acrílicos, ya que son similares en apariencia a los cerámicos, aunque mucho más ligeros.
Los platos de ducha de resinas
Son los más demandados, ya que están disponibles en un sinfín de colores, tamaños y acabados. Te aconsejamos los platos de resina que tengan el mismo color en todo su grosor, y no solo en la capa superficial.
Si se desconcha por un impacto, no se verá blanco. Si tienes en casa personas mayores opta por los platos de ducha de resinas, porque son antideslizantes.
Platos de obra
Los platos de ducha de obra son modernos y comparten el mismo tipo de suelo del baño consiguiendo un efecto continuo muy decorativo.
Pero son caros y si no se impermeabilizan correctamente pueden presentar grietas o humedades.
«Elegir una mampara para la ducha tiene varias ventajas decorativas evidentes. En primer lugar, se aporta un estilo más minimalista, elegante y moderno al espacio. Probablemente, la mejor opción es instalar una mampara de suelo a techo que carezca de perfilería. Visualmente, la ducha parecerá mucho más amplia y, además, permitirá ver el acabado elegido para el interior», informa El Mueble.
Para un baño moderno opta por una mampara en blanco, así conseguirás un efecto más luminoso y amplio. Aunque las mamparas con el perfil negro aportan sofisticación y elegancia. Te aconsejamos que también elijas la grifería negra.
Te encantará tener en el cuarto de baño una mampara de vidrio coloreado en azul o verde. Incluso, optar por tonos más cálidos, como el beige, marrón, bronce, etc.
La mampara de la ducha o de la bañera se ensucia por los jabones y la dureza del agua. Para prevenir las manchas escoge una mampara con tratamiento específico y tras cada uso, pasa una espátula limpiacristales por la superficie.
Para acabar con la cal o los restos de jabón, mezcla la misma cantidad de agua y vinagre blanco y sumerge una esponja para que se empape. Frota la superficie con movimiento circulares y enjuaga con agua.
Para crear un limpiador mezcla vinagre blanco y bicarbonato. Aplica esta mezcla sobre el vidrio y deja actuar 15 minutos. Después, pasa un paño humedecido en agua y seca toda la superficie.
Si quieres que la mampara brille pasa un paño humedecido con zumo de limón.
No debes usar un estropajo de aluminio para limpiar el vidrio o los perfiles de la mampara, ya que pueden rayarla. Lo mejor es que compres estropajos suaves, específicamente diseñados para baños.
¿Cómo pintar el plato de ducha?
Si quieres renovar el plato de ducha, te aconsejamos que optes por un tono neutro. Debes seguir los siguientes pasos:
-Antes de pintar se recomiendan limpiar bien el plato de ducha.
-Desinfectamos y esperamos a que se seque todo.
-Lijaremos la superficie para conseguir un acabado brillante.
-Debemos proteger las partes que no vamos a pintar con cinta y papel de enmascarar.
-Mezclamos el catalizador de la imprimación.
– Aplicamos una capa sobre la superficie del plato de ducha y esperamos unas 24 horas.
-La segunda capa será de esmalte de poliuretano que activaremos con su catalizador.
-Esperamos de nuevo que se seque para aplicar la capa de pintura.
